viernes, 30 de mayo de 2014

Llamada

Siguen sin prohibir los atardeceres.
Quizás por eso solo podemos vernos de noche, luces filtradas y reflejos. Quizás por eso hoy no te llame; ha salido el sol. Sin luz tenemos más que contarnos y aprovechamos para no decirnos nada, con el acuerdo tácito de que la primera caricia es despedirse a primera hora, y ya hablaremos otro día.
Aunque haya salido el sol las cabinas telefónicas amenazan; te arrancas la costra y sientes la carne palpitar.
Dame veinte minutos, contesta.
Un código de tiempo, una espera para que el tiempo no importe, un billete de ida y vuelta tan largo como la noche.
Quizás llegue tarde y espere a que se ponga el sol.


miércoles, 28 de mayo de 2014

Flou

La caricia es la paz de los salvajes.
Surcan callejones
estos héroes y su rebelión
seis de la tarde
seis de la mañana.
Han bajado las persianas
y luchan, frente a frente,
aniquilándose
extirpándose el alma a bocados
sin remordimiento ni piedad.
Buscan la muerte, la encuentran,
vuelven a pelear.
Los salvajes y sus caricias
amenazan en cada esquina.



martes, 27 de mayo de 2014

Rumble fish

Nos gusta tanto escribir entre líneas
que seguiremos tejiendo hasta no caber entre los huecos.
Como peces de siam ensimismados con nuestros colores, aguardando el momento de saltar y despedazarnos el uno al otro.
La sinestesia de las escamas flotando es punk
cada mordisco precede al siguiente
buscando la síncopa de tu mandíbula
(y tu la mía, pero esto lo escribo yo).
Cuando terminemos la pelea estaremos dolidos
nos lameremos las heridas un rato
y chao, ha sido un placer.
Ambos sabremos que ha sido una victoria
y la aceptaremos con elegancia.
Nos vemos en el descampado a las diez.
Rájame, ojos de navaja.



Wild at heart

En su poema favorito, de Corso, un hombre esperaba el retorno de su amante, una princesa egipcia muerta siglos atrás. Pero Corso nunca escribió eso, y lo sabía; seguía siendo su poema favorito.
Los versos inexistentes, quizás alguna palabra acertada, pero al fin algo inconcluso, esa era la mejor manera de expresar la espera. Quizás por eso Corso nunca lo escribió.
Si le preguntabas porque su poema favorito era uno que no existía, te decía que corrieses hacia el primer arcoíris que encontrases.
-Te cansarías, o desaparecería antes de que llegases, así que busca un lugar en el que sentarte y disfrútalo. Allí te encontrará la princesa.


domingo, 25 de mayo de 2014

Sin prisioneros

Podemos sonreír,
por mucho que las calles estén tomadas por personas que se enfadan porque no les pides una explicación.
Tenemos el cuarto fortificado.
Perplejos, nos miran como a idiotas sin ser capaces de entender que escuchemos una vez tras otra la misma canción.
Los del "para siempre" en la boca no saben que los besos son mas húmedos cuando aceptas el compromiso de vivir enamorándote cada cinco minutos.
Jamás podrás explicarles esa danza con una poesía, pero no dejes de escribirla. Sera la innecesaria bandera con la que cubrir los cuerpos desnudos a los que no pueden aspirar.




Romy

En la mañana del crimen. No. Quizás un media res y volver al principio. No. Ya ha sucedido. Pero todo en pasado, siempre todo en pasado, tan aburrido que ni los farolillos de las subordinadas lo solucionarían. Pero si no miramos atrás no vamos a entender las motivaciones. Motivaciones; vaya mierda de palabra. Si, definir al personaje por sus actos, pero entonces habría que engolarlo, el simple acto visto desde fuera no concreta. Y la literatura de respuestas no sirve mas que para llenar estanterías.

Un crimen.

Fin.




sábado, 24 de mayo de 2014

L'enfer

O libro que tiña nas mans
sorríame e dábame medo
nel so via meu reflexo
nunha tapa de cartón duro

We missed those days.
Everything was a mess, but ours 
and

Quieres ensuciarte, envuelta en tu profilaxis.

viernes, 23 de mayo de 2014

Mifune

1
Mifune ha muerto y nadie tiene la verdad.
Perdimos la guerra
dicen algunos
nuestra barricada de muslos y sudor
resiste y sonreímos.
Ni científicos
ni académicos
ni los hijos de puta que descifran metáforas
pueden entender la mecánica de los cuerpos celestes.

2
Seamos arrogantes.
La cabeza alta y la mirada afilada
y sea nuestra música su ruido.
Satisfechos sin dormir
mientras ellos abjuran de su insomnio.

3
Ven
Voy
Vamos
Vete
Vuelve


sábado, 17 de mayo de 2014

Carreiros y autovias. 1, o no.

Renegar de la codicia es una jugada ambiciosa.
Le dijo.
Y no es que le gustasen los enigmas
ni siquiera tocar las pelotas
pero cuando le faltaba lucidez buscaba contradicciones hasta en las mismas palabras que aseguraba eran mentira.
La Magia del espacio en blanco
bla bla bla
la diferencia de tono entre boli azul o negro
bla bla bla.
Practicaba la sonrisa ante el espejo, decía que para que al relajar los músculos la expresión de indiferencia fuese mas pura. Y allí se sentaba, en algún banco aparecido en medio del vagabundeo, a ver cosas que conseguía no recordar.
El cómico mas puro es que no se queda a escuchar las risas de la punchline.
La vida sentimental es el running gag que nos sostiene.
No te quise, solo eras mi MacGuffin.
Anotaba.
Y como cualquier ateo deseaba creer que Dios existe y le odia, y que el castigo es la indiferencia.


miércoles, 14 de mayo de 2014

LSM 4

En su primer viaje Oskar estaba abrumado. Solo comía lo recomendado en los albergues, repartiendo el vino en pequeños sorbos entre bocados. En su cuaderno dibujaba cada árbol que no reconocía.
A su llegada un antiguo tratante de Mathliss llamado Montignac lo acompaño en silencio hasta las puertas de la Abadía de Orly. Así fue cada día durante tres meses. Allí, sentado en la biblioteca, observaba el trabajo de los monjes amanuenses. No podía acercarse a los volúmenes ni compartir con ellos otro espacio. Cuando se retiraban al refectorio, el comía a solas en una celda vacía.
Montignac le recogía a las cinco de la tarde para llevarlo a casa de sus anfitriones y siempre le hacia la misma pregunta:
-¿Qué has aprendido hoy?
Oskar debía contestar durante todo el camino; si callaba, Montignac detenía su paso hasta que retomase la narración. Aprendió a describir cada detalle del trato de las tintas con el papel sin haber leído siquiera una línea.
Se hospedaba en casa de un criador de lebreles. La hija, Teresa, se acostaba con el todas las noches y hacían el amor sin ruidos para no despertar al padre. Nunca durmieron juntos.

Una tarde contesto a Montignac que había aprendido la belleza del silencio; una semana después regresó a Klaasenburg.

LSM 3

No era su sobrino, aunque así se lo dijese a todos. Era parte de una deuda que ya no podría pagar y asumió el compromiso de cuidarle y enseñarle su arte. Al regresar de la escuela leían juntos y le explicaba el significado de los mitos en las tragedias griegas. El valor del vacío en un haiku. La rigidez de la poesía amorosa medieval. A los catorce años lo sacó de la escuela y por vez primera le permitió entrar al taller. Allí pasaba las mañanas y por las tardes le señalaba que leer, ya a solas, hasta que en la cena le preguntaba por sus impresiones. Oskar adornaba sus expresiones tratando de impresionar a un Mathliss que apenas replicaba. Tenia diecisiete años cuando le dio su primer libro de poesía moderna y las conversaciones sobre literatura terminaron.

LSM 2

De pequeños jugaban juntos y los demás niños se reían de el por preferir la compañía de una niña. Camilla se fue cuando el tenía diez años y diez años pasaron hasta que la vio volver. Mathliss les prohibió estar juntos y Oskar no pudo saber como había cambiado su voz. Cada tarde tenían un momento de intimidad; ella sentada junto a la alberca, el observando por la ventana. Cuando Mathliss lo llamaba para cenar notaba en el un odio apagado de viejo Capuleto.

LSM 1


Jonas Mathliss se había asentado en Klaasenburg diecisiete años atrás con su hija Camilla y Oskar. Abrió un pequeño despacho de restauración y encuadernado de incunables al que acudía la burguesía de toda la región. Jamas salio de la ciudad ni recibió en su casa mas visitas que la de los comerciantes a los que compraba pieles,hilos y tintas nobles.

Riverside

Un beso sin lacre.
Resérvalo para las postales
las cartas desde lugares lejanos
y no preguntes que tal estoy.
Todas las ciudades tienen un callejón de ladrillo embadurnado con las letras de las amantes perdidas.

(Sí, te la dedico)