lunes, 30 de junio de 2014

Danza

Mientras bailamos
y nos susurramos
lo hermoso que es
que solo sepamos darnos
lo que no necesitamos.


domingo, 29 de junio de 2014

La lija de los días

Eterna presión
grabaste con celo en mi carne
noche, día, noche
un elaborado trabajo
una obra
que crea obras
obras que ríen, hablan y lloran
remodelándose
el mármol que nos sostiene
y reinventa la distancia justa
para que con gestos efímeros
voladores
construyamos epopeyas
odiseas de un par de horas
y seguir eternos
impuros
incorruptibles.


Gigantes

Esa noche en la que olvidamos las razones.
Dioses caprichosos que no saben de bondad riéndose del incendio, recreando fábulas chupando el cuello de una botella. Hermosas las bestias, girando en círculo mientras miden sus fuerzas. Todo bien.
Solo se prometen arrogancia y desdén
espalda contra espalda
cada uno con la mirada en su propia dirección
Ríen emputecidos, sanan con saliva las heridas. Ya cauterizados se despiden hasta la próxima noche en que se encuentren sin ninguna razón.


Soul Army

Open wounds
no stitches
nurses running through the hall
dumping meaningless bodies.
Careless scupltors taking a nap
while their mud chokes
an unfinished Venus.
Runners bending on their knees
offers a new soul
to the oldest demons.
Dancers
go wild
die on stage to avoid surrender.


sábado, 28 de junio de 2014

Amantes asesinos

El filo es frío hasta que corre la sangre.
Salta la escarcha
fuegos de artificio
curioso
cuando no queda nada artificial
y asistimos a la debacle
llamandola decandencia
o milagro
según el día
según el momento.








Lipstick grafitti

Felactores cuningulizando destilando moonshine inflamable, 57º de ardor impuro salpicando la cueva; Rothko en una esquina. Cuchillas de afeitar en la punta de los dedos, dedofilia, ataque-rendición-rebelión, lengua de barbero y corre la sangre. Frío Mondrian.
Conocimiento del lenguaje de las descargas sacras, prueba-no error y el mapa de los elementos sujeto a escalofríos y empellones. Orificios, salientes, probetas, pipetas, escupitajos reinventando el universo en una placa de petri.
Amor y odio u odio y amor, torturas a besos, caricias y ocasionales bofetones elevan el logos al mito-la fe-el ateísmo y ya pueden quemar hasta los cimientos.
Viendo al mamut, cazando el mamut, devorando el mamut, dibujando el mamut. La historia anónima de dos salvajes cambiando el mundo impertérritos. 


Los dislocados, los magos

Con su justicia de nueva carne
las neuronas táctiles de los jóvenes perpetuos sacuden tormentas
hielo y fuego
son apología de la batalla de cada cual
sentidos y verbo
aferrados en la danza del hacerse entender
y ojala si
pero da igual
sujetos y objetos de una mutación dirigida por su existir
su yo
saben que por una vez jugar es ganar
las cosmogonías se dibujan
se usan
y se tiran para reciclar.




jueves, 26 de junio de 2014

Cartas marcadas

Hola.
He venido a que me hagas la violencia.
Vacíame, hazme folio en blanco y practica tu papiroflexia; incendia el avión antes de lanzarlo por la ventana.
Viola mis conexiones sinápticas, obliga a mis neuronas a escupir sobre el charco para que no se coagule la sangre. Regálame una bufanda con la que morir ahogado.
Títeres sin hilos danzan descarados, el público huye despavorido de la función.
Te ofrezco mi espalda; usa la pluma, la lengua o la espada, da igual, nunca veré el resultado pero viviré el proceso.
Provócame. Empújame. Golpéame.
Hazme la violencia y no te molestes en explicarle a nadie porqué es arte. Pero hazlo. Llevo demasiado sin sentir miedo.


miércoles, 25 de junio de 2014

Eli 2

Convencerás al portero para que te deje entrar.
Pedirás un whisky en la barra.
Sonrisa, cigarro al suelo apagado con el tacón de la bota gastada. El estroboscopio de tu escopeta ciega a unos cuantos.
Te llamarán poeta y no asesino porque lo harás con una razón y una justicia; serás el único vivo que no bailará sobre el cadáver de los tibios muertos, vigilando que nadie ose interrumpir tan sagrada ceremonia.




Eli

Ya estuviste antes en el cielo, Tuco.
Recorriste las carreteras reservadas a los salvajes y a los abandonados que huyen del norte, retorciste el cielo para impedir que las estrellas fuesen mapa pero sin perderte su fulgor.
El último misfit, el forajido amable.
Los poetas como tu solo os alejáis del horizonte con una sonrisa en la boca.


martes, 24 de junio de 2014

Veritas

Tras una dura pelea con las palabras, se retira satisfecho dejando un escrito sobre la imposibilidad de explicar ciertas sonrisas.
Y lo que existe sin tener un nombre, e intenta explicarlo, y sonríe a la sonrisa que ni puede predecir ni comprender pero que existe aunque no la vea.
Vuelve a la mesa, rompe la hoja. Esta mañana ha hecho bien su trabajo.


domingo, 22 de junio de 2014

Fábula del apocalipsis

Dos robots se enamoran en la línea de montaje de una gran empresa del motor.
El plan del gobierno ha funcionado y las calles se llenan del nuevo modelo. De su equipo de música sale siempre la misma canción de los 60; los ciudadanos la tararean encantados, es el himno de una generación.
Una mañana se levantan y hay un seto florido que separa aceras del asfalto, los garajes son junglas donde solo los mas intrépidos se atreven a penetrar.
Un ingeniero rumia como resolver el problema mientras calienta la cena en el microondas.
Días después, los robots planean una nueva travesura en la parte trasera de una chatarrería.


sábado, 21 de junio de 2014

Rio

Círculos concéntricos
la onda se expande
el sonido se apaga
la piedra se hunde.
Mañana sera otro día
dices
y volverás a decir mañana
aunque todos los días sean el mismo día
y ninguno se repita.


viernes, 20 de junio de 2014

Inquilinos tras la verja

Reducido el sexo a un alfabeto de posturas
el amor a vínculos y promesas
pocos lenguajes quedan por deconstruir.
Ese es el hormigón
la plaza dura que espanta a los niños
a vista de pájaro podemos soñar
que en un par de noches
será legal preparar un incendio.




Asesinos y complices

Nuevos poemas de Neruda
otra palada de grava escondiendo la cuneta de Lorca
ripios de flores
ejercicios de rima amoral
renunciar al humor pretendiendo humildad
amor asexual
vacían los cargadores de la literatura.

El ministerio de propaganda celebra su cierre
la modernidad aplaude el vacío.



jueves, 19 de junio de 2014

Exhortación a la Isla

La piel
patria única 
inapelable
no necesita banderas
himnos o desfiles
solo el aliento
de las bocas
que abren las fronteras de la patria.



Binario

Tan insaciable el hambre de aprender
que reclama que la carne tenga misterio.
El logos y su tonta manera de codificar lo que ya le decía el mito es el ovillo del gato sobre la alfombra raída.
Déjale, que intente reflejar en una ecuación la perfecta curva de tus senos.
Morirá atropellado mientras piensa en ello y cruza sin mirar un paso de cebra.


miércoles, 18 de junio de 2014

Push

Pleamar a las seis y diecisiete.
Muros de contención para las ojivas nucleares y las sirenas advirtiendo del riesgo. Nadie corre, nadie observa. Una comunión de ojos cerrados saluda, una procesión de mendigos camina hacia el barranco mas cercano.
Mientras tanto, en otro lugar, alguien inventa un nombre y una fecha para lo que va a ocurrir.



Pull

Como amantes
además amantes del drama
preferimos ser haiku.

Silencio
alguien podría interpretar las voces
como una combinación de frecuencias.

Ni pronto ni tarde
ni minuto
solo es un momento.

Evitando
principio y desenlace
enredando el nudo.


Subordinados

El tiempo y las malas noticias, o la falta de noticias, escriben una columna de opinión con cuatro referencias y dos cultismos.
Tres tipos de desdén en una misma tarde redactan un artículo motivado por la curiosidad científica.
El ritmo invisible del poema está en el tecleo.
Vicios sin prospectos que adviertan de efectos secundarios, dosis recomendadas y protocolo ante intoxicaciones.
Voluntad de dudar en din A4.




Silente

Una punta de alambre al rojo vivo, la señal de que la vida real había vuelto para quedarse.
La trinidad de juventud, amor y muerte, la falsa fe, las iglesias de ediciones baratas y páginas manoseadas.
La tumba de hormigón. La felicidad rebosando de los contenedores. Un número primo sobre tu cabeza.
La epifanía de la locura y el voltaje, la estática condensada y el brillo del canto de un pájaro que no es un ruiseñor, pero si lo decides no tienes porque escucharlo y es un ruiseñor.
Lametones en las gruesas cadenas de la libertad.
Sexo verbal en los muros.
Fotos de interiores cubriendo las ventanas.




martes, 17 de junio de 2014

El panal

Cuentan con los dedos y se olvidan de observar lo que se ve a través de ellos. Atados a lo tangible señalan con los dedos gastados a los perseguidores, acusándolos del reflejo que les da su sonrisa.
Quieren que les vendan momentos bien empaquetados, lucirlos en sus estanterías cárcel; vanagloriarse de la colección de besos, golpes y caricias que otros atesoraron ante sus pares, esforzándose por no entenderse en el mismo idioma para mantenerse sobre la columna.
No tienen miedo de los perseguidores.
Tener miedo es algo a lo que no se atreven.



Widernatürlichkeit

Si fuese la puta asesina que me gustaría ser
no hubiese llorado sobre el charco de tu sangre.
Hábil maniobra no tener nada de ti; imposible borrar el recuerdo. Y la memoria, puta mas asesina de lo que quisiera, pinta cada día un nuevo detalle del mapa de la crueldad.
Entiende que eras demasiado hermosa
y que destrozarte fue una manera de demostrar que el hombre puede hacer lo que ningún dios se atrevería.




La primavera de Montignac

Bolsas en los ojos.
Yo las tenía, perennes, y me dijiste que fuésemos a pasear. Dejé de comerme las uñas y planteamos un nuevo factor; nos follamos la teoría de las cuerdas a bocados como quien no hace nada, sin la mas mínima importancia. Nada había que publicar, rehuir la doctrina sometidos a vuelos nocturnos era toda la filosofía.
Llenamos de oxígeno el vacío y lanzamos los pulmones por la ventana. Cuando se ponía el sol era el momento en que la luz a través de las rendijas cantaba mas alto. La fricción era la música de aquel cuarto anecoico. Cuando la banda dejo de tocar te quedaste las bolsas de mis ojos.
Hace unos días volví a pensar que te habrás alegrado de que haya vuelto el sol.



Patíbulo

Cerca del aliento de la serpiente
forajidos sonrientes secándose bajo la lluvia.
Era temprano cuando fuimos condenados
sobre las diez de la mañana
nos preguntaron el porqué
teníamos un fusil
pasó por delante y le disparamos
hace unos meses
sobre las diez de la mañana.
El premio ha sido
morir colgados el mismo día
si podemos escoger
que sea a las diez de la mañana.


domingo, 15 de junio de 2014

La corona y el callejón.

Cualquier excusa es buena
se  han acabado
ya no queda remedio.
El dibujo de la sangre sobre el asfalto del callejón brilla como una sonrisa cuando su tacón lo pisa. Salpica de lujuria los adoquines, envuelta en humo como un ángel de negro.
La basura que asoma de los contenedores se ciega con su resplandor; el cuerpo apaleado que muere en una esquina es declarado vencedor.


Una cuestión de estilo

La ciudad se desmorona a sus espaldas. Charlan tranquilamente encendiendo sus cigarros; el chasquido del mechero borra los gritos. Hablan silencios en idiomas inventados, su chiste privado, ríen y cantan las virtudes del bardo sobre el bufón o el diplomático.
El calor en la espalda mientras se acercan a los escalones, no se giran para observar el incendio.
Una caricia en el portal, el olor de la gasolina en las manos acelera la respiración.


viernes, 13 de junio de 2014

Invernadero

No firmo contratos.
Digo.
Te parece un insulto.
Callas.

Invitación a la barbarie

La entropía de dos cuerpos en lucha contra la cinética
los neutrones de Hiroshima
son una sabana cálida
abarrotada de latas, mugre y sudor.
La lengua dibuja espectros cerca de la luna llena; el terror del no ser aúlla, atemoriza. La praxis, cuando atados al logos, la praxis es el silencio.
Revivan los mitos.
Hazme la violencia, destroza la profilaxis de mi profundidad.
Libérame a golpes de cadera
insúltame en el santuario
hazme reír.
Deprisa.
Estudio científicos amenazan con averiguar la fórmula del orgasmo.


jueves, 12 de junio de 2014

Piel

Se me ha roto un poema
vino lo real y lo lanzó contra la pared.
Tomamos algo
charlamos
acabamos enredados en la cama una vez mas.
Todos los cuerpos existen desnudos
la piel es privilegio
el tablero
las fichas
la piel no tiene puntuación ni final.


Acción Revolución

Ellos solo son un nodo en el flujo de información.
La revolución televisada
la devaluación del sudor
del olor húmedo del sexo
dedos escarificados aquí y allá.
En el guetto la propaganda
caligrafiada en tu espalda desnuda
violencia
el placer es violencia, el ataque frontal, el arma entre tus muslos.
Ni 101110 ni porcentajes
escupitajos desheredados al rostro en el espejo
muerde fuerte los pezones
reivindica el grito primordial.


En tránsito

De las mañanas esta mañana
y del olor tu olor
despejan las incógnitas sobre la parábola pura.
El mecanismo-playa
arena y el reloj
otra docena de noches
buscando la iteración.


miércoles, 11 de junio de 2014

Justine y el post-algo

Mordisqueas el nombre y el dolor
el muro de caucho
en tus labios noir.
Llueve y bajas a la red
funambulista
lames un poco de vulgaridad y vuelves a flotar.
La sonrisa
para que te toque
y decirme
no lo hagas nunca mas
otra voltereta
me escupes y acaricias
invitado al numero final.


martes, 10 de junio de 2014

El veneno del Golem

La densidad del sudor meditado agota; los pulmones se esfuerzan por renovar el aire viciado que otro rechazó antes, no se ve nada por la ventana.
El giro, nadie se mueve, pero el giro. La espuma del vaso parece enmohecida, tus tobillos apenas sujetan los pies acalambrados mientras pateas la reja, inútil, esfuerzo vano. Esfuerzo vano. La magia que resta son esos absurdos que no creíamos; el peso del aire derrumba los brillos.
Creímos lo que decía Andrade y descubrimos que la fe se desvanece, ahogados, y sin fluidos.
Creímos que eramos vacuna y somos lepra en un colchón gastado.
De todas las noches esa noche, ni por el número del mes ni por la luna, pero tenía que ser esa noche. Plegar sin remar, llegar a algún puerto desierto y cenar famélicos entrañas regaladas por rostros descarnados, sin preguntas.
El plan solo falló porque teníamos un plan.




Incendio POP

Entiéndelo. Dejé que te quedases a dormir porque vivo en un cuarto sin ascensor y sé lo mucho que te gusta rodar sin sentido por las noches. Claro que hice café y te lo llevé a la cama por la mañana. Es educación.
Has sacado todo de contexto.
Ahora lloras, como si no te hubiese avisado. Te lo dije.
-Mañana se acabará todo. No quedará nada.
Borra esa mueca. Yo te lo permití, pero fuiste tu quien decidió quedarse. No me culpes, recuerdas tan bien como yo que te lo dije. Incluso dijiste que te parecía hermoso, que solo estábamos atados por unas horas.
Y te parece injusto, lo veo en tu cara, crees que no debería tratarte así. Nos conocimos anoche y ya tienes pegas que ponerme, ya te crees que puedes echarme en cara algo. Eres una egoísta. No entiendes la belleza que rodea a esto, y que efímera es mucho mas hermosa.
No se que esperabas.
Nos cruzamos la mirada; bailabas bien, lo reconozco, me gusta como bailas. Lo haces natural, no intentas parecer salida de un videoclip. Eso es atractivo, de verdad. Creo que por eso me acerqué, si tenias belleza en ese momento podrías tenerlo en algún otro.
Me gusto cuando nos paramos a bailar camino de casa, me gustó que tardásemos tanto en llegar a la cama recorriendo el mobiliario, me gusto como te mordías el labio, y te lo dije, fue una buena noche.
No se para que te recuerdo esto; por tu cara veo que no le das ningún valor, como si no tuviese importancia. Es imposible que nos entendamos. Deja de llorar, ya no tiene remedio. No quiero que hables. Quisiera quitarte la mordaza para que besases la cuchilla, pero creo que solo gritarías y me duele la cabeza.


No hay spleen para los vagos

El aullido de cada mañana
cada grito al aire que liberas
persiguiendo el momento
ese momento
en el que consigues quedarte sin palabras.


domingo, 8 de junio de 2014

Anoche bebí demasiado

Surcando camas
encuentra
el método para posponer la resaca.
El collar de sesenta perlas
la chapa de doce puntas
la correa se tensa
camina hacia el próximo lago.


sábado, 7 de junio de 2014

Compasión

Los expulsados pierden el derecho a conseguir su propio alimento. Cada tres días les dan una dosis mínima en la Hermandad, son los parias que sirven de ejemplo a los demás. Se les puede ver vagando por las calles a cualquier hora del día, babeando en los escaparates de las carnicerías halal y pajeándose unos a otros en callejones. No hablan. Se limitan a esperar el momento.


Evolución

2001:
Las albóndigas son la mejor metáfora de la humanidad

2012:









2014:
Vegetariano

viernes, 6 de junio de 2014

Pleamar y los peces aguja del Pacífico

La isla es cualquier lugar donde el mar pueda devorar la tierra. Es la amenaza de nada firme, el zen del cielo estático susurrando lo que quieras escuchar.
No pasan barcos.
No se curva el horizonte.
Nadie te observa en la isla; sobran los lamentos.
Polizones sobre tablas intentar llegar, pelean contra la corriente que les responde impasible, evitándoles llegar a la playa pero sin dejar de verla. Sísifos desharrapados. No tienen tiempo para dioses. No tienen tiempo para fe.
La isla es el escenario mínimo
pequeños gestos
rodeada por un océano de crueldad
la lírica de la isla es el sustento que resta.




Hoja de ruta

Deadlines
Mishima
Punk.
6 de Junio
30 de Julio
30 de Agosto
29 de Septiembre.

Tiempos modernos

Recuerda
Casandra
que ha dejado de ser una maldición que no te crean.
















(para B)

...et facta est lux

1
Hoy se han despertado las siete bestias que intentarán matarme.
Esta noche lloverá, habrá reflejos en el asfalto que nos den esa ilusión de luna llena; el motivo, muy importante, pues no hay motivo.
Llama.
De fuego, de boca.
Espero.

2
Buscas arder en el silencio de la cueva. La antorcha cómplice vagabundea entre callejas buscando sombras que la cobijen. Apaga las tinieblas.
Llama.
De voz, de grito.
Espero.


jueves, 5 de junio de 2014

Let's go

Ciegos orgullosos
incapaces de deslumbrarse.
Horda que jamás podrá vencer al orgullo caníbal de los jóvenes furiosos, malabaristas del abismo sonriendo a la fosa común mientras callejean cogidos de la mano buscando una fuente en la que bailar. 
La pintura de guerra es la mirada afilada que los distingue; la cuchilla de sus dedos el arma que desgarra y abre el cuerpo al dolor, la luz, la respuesta que queda.


Herejes del solsticio

Explotarán estos tiempos
de sentidos austeros
excesivas formalidades.
El brillo y la detonación
bola de espejos
discoteca del azar y bailes sobre esqueletos.

La danza es la muerte
de los fallecidos
cientos de seres abandonados
la fábula corrupta
terciopelo en los ataúdes
dos figuras emergen en el cementerio.

Somos sacrilegio
los verdugos de la paz
follan satisfechos
profanando vuestros rincones.



martes, 3 de junio de 2014

Walkman

La sangre sabía dulce, dulces también las lágrimas.
En una curva de carretera comarcal encontramos el barranco perfecto para el sepulcro. Hartos de golpes y adictos a ellos, ni un paso atrás, uno tiene que caer.
Y no caía nadie.
Guardábamos en secreto que ya lo sabíamos; fuimos a aquella habitación sin árbitro para poder ensañarnos atroces, sucios, machacar la carne y comernos la pulpa, fruicción caníbal en el akelarre de las maldiciones. Durante segundos nos cegó la espuma. Una vista en un barranco.
Pero fuimos honestos.
Entre hierros retorcidos los cuerpos desgarrados siempre dicen la verdad.




El celibato de los grillos

Demonio
como una lápida sobre mi cuerpo
veo caligramas en tu melena
el grito de tu espina dorsal.
El abandono
la paz
la furia de la implosión.
Solo deja un pedazo y mañana podré volver.


Stay gold

Quiero decirte
que escribo poemas para saber que soy más que alguien que escribe poemas
que en mi pecho han escrito su epitafio algunas muchachas que han venido a el a morir
que me aburriré de ti para evitar que seas tu quien se olvide de mí.
Debes saber
que si te hago una promesa es que no tardare en romperla
que dejare de saber leer lo que dicen tus rizos al agitarse
que mis pupilas caóticas se volverán hurañas al verte.
Hechas todas las profecías
ya podemos salir del cine encantados con la mirada de Paul Newman
y buscar aquel rincón donde pensamos el primer baile.



domingo, 1 de junio de 2014

Última noche en Las Vegas

Nos habían prohibido el paso en todos los grandes casinos, pero conseguimos encontrar una buena partida.
Los pardillos cayeron rápido. Llevábamos tiempo deseando medirnos en un mano a mano, y ahora estábamos en ello.
Para los dos era la última noche en Las Vegas.
El juego se trata de conseguir que el rival apueste todo lo que tiene; solo importa una mano, el resto son los preliminares para saber quien se la lleva.
Nos conocemos demasiado. Todos los trucos, los falsos gestos, como intentas colocarme que vas de farol cuando eres todo ases. No somos capaces de engañarnos.
El sueño no nos desgasta.
Aguantamos bien la bebida.
Fichas van y vienen, desajustamos y reajustamos nuestras torres, no dejamos de mirarnos.
Ninguna señal de que el juego vaya a cambiar.
Otro pardillo entra en la mesa.
Lo despedazamos en instantes, compra mas fichas, le dejamos casi seco.
Sonríes. Sonrío.
Echamos todo al pozo y dejamos las cartas sin girar, todo para el pardillo.
Un café nos espera antes de dejar la ciudad.


Detour

Una fila de termitas recorren la espina dorsal
fría superficie
volutas entierran al demonio una tarde cualquiera de domingo.
El pacto se sostiene; algunas cortesías, conversaciones de puesta en común. Una alegoría de la necedad para evitarla a posteriori. Cumplamos el ritual.
Desencadenados de rigores ya podemos desatar la tormenta. Recuerda que te odio, pero no por eso voy a dejar de tocarte. Recuerda que te quiero.
Arde sal en las heridas
lengua
abejas danzando frente al panal.
Esta tarde es otra tarde mas, como cualquier otra tarde. Lo leve. El vuelo.
No sabemos que día es mañana, si es que siquiera mañana es algún día, pero aquí seguimos lanzando retos y enviando postales a domicilios ajenos.
Los buzones de las pequeñas ciudades mueren ahogados con cartas de amantes desconocidos
los callejones sonríen
ciertos rincones esconden sus secretos
el paseo nunca termina.


Eros y los dioses ofuscados

Arrastrado en el suelo de la cocina, tan bien barrido que refleja mi rostro.
Hiel.
Trago hiel a cucharadas mientras tu (yo) me observas, creyendo que me quieres. Has pasado del vicio de odiarme a pensar que me amas, tiemblas por la incertidumbre de saber si te correspondo y sonries cada vez que yo (tu) lo hago.
Harto de tu limerencia, y de no esconderme de ti ni apuñalarte como debiera, derramo el te; no es todo lo amargo que debiera y multiplica tu (mi) reflejo en una danza infernal, paroxismo de cuerpos antes ilustres revolcados en esa superficie fria que recuerda el destierro, el tiempo de la incertidumbre y los medios gestos, aquella gala en la que bailamos poseidos por los angeles.
Tu, yo, nosotros. Palabras torpes intentan sustituir al nombre, como si llegase con no nombrar para borrar la existencia.
Pactemos un beso, una paz. Hagamos juntos la guerra.